Dos fuertes señalamientos hizo el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero: que se vayan a una pasarela quienes busquen lucirse, porque quienes quieran servir deben hacerlo metiéndose en las comunidades, y la lamentable confusión de muchos del derecho de los indígenas con el folklore.
Esto, insistió, provocó el silencio total de los hombres y mujeres que desde hace décadas reclaman sus derechos sociales: “Y mientras no haya una justicia social en los hechos no habrá gobernabilidad en los pueblos, definitivamente, es por eso que este tipo de reuniones no deben elevar el culto a la personalidad del político sino el culto al derecho social de los pueblos originarios”.
Además Navarro Quintero, dijo coincidir con las políticas que ha implementado el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para favorecer y proteger a los pueblos originarios al firmar el decreto que protegerá sus territorios.
Recordó que en una ocasión, el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, a nombre de todo el pueblo de México solicitó perdón a los grupos originarios de Latinoamérica por el daño que les provocaron quienes invadieron sus territorios: “Particularmente en México, Centroamérica y Sudamérica porque creyeron que la dignidad de los pueblos originarios se compraba y algunos con el paso del tiempo no solamente vieron que se extinguían como aquí se mencionaba, pero lamentablemente no sólo se quiso extinguir, también se quiso sepultar”.
Aseveró que los dueños de los territorios eran quienes integraban los grupos originarios: “Ellos son dueños del territorio nacional y ellos, los originarios, les asiste el derecho, ellos no son los arrimados, ellos han sido bondadosos en el desarrollo de los pueblos y comunidades de México y otras partes del mundo”.
Finalmente el gobernador Navarro Quintero refirió que en el pasado se discriminaba al adulto mayor y más si se trataba de ancianos nacidos en pueblos originarios: “Lo mismo que en los pueblos mestizos, en los pueblos originarios los adultos mayores se metían la mano a la bolsa y no tenían ningún cinco, tenían las bolsas rotas y los ánimos destrozados, eso es lo que tenían, hoy en día gracias al presidente de la república tenemos más justicia social y una justa distribución de la riqueza, porque antes territorios de nuestros pueblos originarios fueron arrebatados y legitimados a otros y eso no puede ser posible ni podemos aceptarlo, hoy tendremos que enderezar lo que se había torcido, tenemos que volver a dar luz a lo que había oscurecido y tenemos que peregrinar en reformas que no solamente tengan contenido en el escrito sino tengan realidades en el hecho”.
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