La violencia familiar se ha convertido en una preocupante epidemia en todo México, cobrando un alto tributo en la salud y bienestar de miles de personas en el país.
En un revelador informe del boletín epidemiológico de la Secretaría de Salud, se detalla que, a nivel nacional, un asombroso total de 46 mil 494 personas han sido hospitalizadas debido a la violencia familiar. Ya sean lesiones leves o graves, estas hospitalizaciones reflejan el impacto devastador que esta epidemia tiene en la sociedad mexicana.
La magnitud del impacto de la violencia familiar en la salud de los mexicanos es tal, que la Secretaría de Salud ha incorporado un apartado específico en su sistema de seguimiento para rastrear su incidencia.
Lo que hace que este fenómeno sea aún más alarmante, es el hecho de que las hospitalizaciones por violencia familiar están en constante crecimiento. A nivel nacional, se ha registrado una alza de 9.19 por ciento en el número de hospitalizaciones en comparación con el mismo período del año anterior. Sin embargo, la situación en Nayarit es aún más preocupante, con un alarmante incremento del 30.74 por ciento en las hospitalizaciones por violencia familiar en comparación con el mismo período de 2022.
Este aumento en las hospitalizaciones por violencia familiar ha llevado a una dramática estadística en Nayarit que cuenta con 706 personas hospitalizadas en lo que va del año, lo que en promedio sería 2.5 personas diariamente debido a esta problemática.
El último boletín epidemiológico, correspondiente a la semana epidemiológica 40 (del 1 al 7 de octubre), revela que en Nayarit se han producido 17 nuevas hospitalizaciones debido a la violencia familiar, lo que representa un aumento del 88.8 por ciento con respecto a la semana anterior.
Una característica notable de esta epidemia es que afecta a todos los miembros de la sociedad, independientemente de su género. Las hospitalizaciones registradas por la Secretaría de Salud incluyen tanto a hombres como a mujeres, las edades no son reveladas pues recrudecerían más los datos. Sin embargo, de los 706 casos reportados en el estado hasta la fecha, el 90 por ciento de las víctimas son mujeres, que incluyen madres, hijas, hermanas y abuelas, mientras que sólo el 10 por ciento son hombres.
La violencia familiar es un problema que no puede ser ignorado, y se requiere una acción inmediata y efectiva para abordar esta creciente epidemia. La salud y el bienestar de miles de nayaritas están en juego, y es fundamental que se tomen medidas para proteger a las víctimas y prevenir futuros casos de violencia familiar en la región.
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