Se quedó dormido, chocó su auto que fue atravesado por la barrera de contención, y resultó ileso.
Es la historia de un joven de 22 años de edad, que circulaba durante la primera noche del 2024 sobre el Libramiento de Tepic, a la altura de la entrada al cerro de San Juan.
Fue a bordo de un Nissan Versa color gris en el que el muchacho circulaba, y que posteriormente quedó destruido a causa del accidente; la barrera metálica, que pasó a unos centímetros del chofer hizo un hoyo en el parabrisas y llegó hasta el asiento trasero del coche, el cual sufrió también otros múltiples golpes.
Cuando arribaron elementos de la Secretaría de Movilidad y de la Policía Estatal, se percataron que pese a los severos daños materiales del Versa, su conductor resultó ileso, ni siquiera necesitó ambulancia; él mismo reconoció que le ganó el sueño y eso fue la causa del accidente.
El auto, por cierto, quedó inservible sobre el Parque Lineal; pudo haber sido un accidente fatal, sin embargo, el joven automovilista vivió para contarlo, justo en el primer día del año.
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